Intel tiene anunciado su tarjeta gráfica Crescent Island, una GPU optimizada para inferencia basada en la arquitectura Xe3P. El dispositivo está diseñado para acelerar las cargas de trabajo de inteligencia artificial y está previsto que comience a enviarse en la segunda mitad de 2026. La GPU Crescent Island utiliza la microarquitectura Xe3P Celestial de próxima generación, un diseño muy optimizado en torno al rendimiento por vatio para maximizar la eficiencia. La tarjeta estará equipada con hasta 160 GB de LPDDR5X VRAM. Esta gran capacidad de memoria proporciona un margen sustancial para admitir modelos de lenguaje grandes y otras tareas de inferencia de IA que requieren mucha memoria. El enfoque en la eficiencia tiene como objetivo extraer el máximo valor de las cargas de trabajo de IA que procesará la GPU. El énfasis en el rendimiento por vatio se extiende al diseño físico y los requisitos operativos de la GPU. Según un informe de Forónixlas tarjetas Crescent Island se refrigerarán por aire. Este método de enfriamiento contrasta con los sistemas de enfriamiento líquido que consumen más recursos y contribuye a una reducción en el uso de energía y agua para las operaciones del centro de datos. Para respaldar el hardware en el lanzamiento, Intel también está desarrollando activamente una pila de software optimizada de código abierto que estará disponible cuando se estrene la GPU. El anuncio de Intel ingresa a un mercado donde las GPU de Nvidia, particularmente la última generación Blackwell, han sido la opción principal para construir potentes superclústeres de IA para modelos de entrenamiento. Si bien Nvidia mantiene una posición sólida en el sector de la formación, el mercado de hardware de inferencia se está diversificando más. Varias empresas están desarrollando hardware más eficiente y eficiente, incluidas GPU y ASIC, creando un espacio competitivo para soluciones específicas de inferencia. El calendario de lanzamientos para finales de 2026 coloca a Crescent Island en competencia directa con productos de próxima generación de otros importantes fabricantes de hardware. Nvidia lanzará su arquitectura Vera Rubin en la segunda mitad de 2026, que se espera que ofrezca importantes mejoras de rendimiento y eficiencia. Al mismo tiempo, AMD ha anunciado su gama de GPU MI450. Las proyecciones sugieren que esta serie ofrecerá capacidades comparables o potencialmente mayores que las de la arquitectura Vera Rubin.





