Google está cambiando el juego de la creación de videos trayendo modelos de IA avanzados, Veo e Imagen 3, a YouTube Shorts. En los próximos meses, los creadores tendrán acceso a Pantalla de sueñouna herramienta que permite generar fondos y videoclips cortos con tecnología de IA. Si bien la tecnología de IA ya está disponible, esta medida facilita su uso a millones de creadores y miles de millones de usuarios. Se trata de brindar a las personas más poder creativo sin necesidad de un equipo de producción completo.
Fondos dinámicos con Dream Screen
Dream Screen funciona comenzando con una indicación de texto simple. Imagen 3El modelo de inteligencia artificial de Google genera cuatro opciones de imagen en función de esa indicación. Los usuarios pueden elegir la imagen que mejor se adapte a sus necesidades y Veootro modelo de IA, lo transforma en un video de fondo de seis segundos de alta calidad. Para 2025, esta herramienta también permitirá a los usuarios crear videoclips independientes de seis segundos, lo que ofrece más flexibilidad para los creadores de contenido en Cortos de YouTube.
Esta función tiene como objetivo hacer que la creación de videos sea más accesible. Brinda a los creadores la posibilidad de generar contenido de aspecto profesional sin necesidad de herramientas avanzadas ni un gran presupuesto. Dream Screen está destinada a ayudar tanto a los creadores experimentados como a los nuevos en la plataforma.
Para dejar las cosas claras, Google está agregando marcas de agua al contenido generado por IA usando SynthID.
Así, los espectadores sabrán cuándo se ha realizado algo con IA.
Las marcas de agua no nos convencieron
Por muy interesante que suene, hay algo en lo que vale la pena pensar cuando hablamos de integrar la IA en cada aspecto de la creación de contenido. Claro, la IA es un juguete nuevo y brillante, pero ¿es realmente sensato confiar en ella para todo? Seguro que has oído el dicho: “Demasiado de algo bueno puede ser malo”, ¿verdad?
Bueno, ese podría ser el caso aquí.
Por un lado, la IA hace la vida mucho más fácil. Acelera las cosas, llena vacíos y abre puertas creativas que ni siquiera sabíamos que existían. Pero, por otro lado, ¿dónde está el límite entre ser útil y depender demasiado? Si los creadores se acostumbran a dejar que la IA haga todo el trabajo pesado, como generar videos, escribir guiones o incluso componer música,¿Estamos perdiendo algo de ese toque humano?
Para aquellos que no son expertos en tecnología: La IA generativa, en esencia, es como un alquimista digital. No solo comprende la información, sino que la transforma y genera algo nuevo a partir de lo viejo. Imaginemos que alimentamos a una máquina con un banquete de novelas, pinturas, música, las obras colectivas de la creatividad de la humanidad. Lo que sale no es solo una regurgitación de lo que se le ha dado. No, es algo original, algo único, o al menos ese es el objetivo.
En esencia, la IA generativa funciona según el principio de aprender y generar, no de crear. Es como enseñarle a un niño a dibujar. Primero, le muestras imágenes y le explicas los conceptos de líneas, formas y colores. Con el tiempo, con suficientes ejemplos, el niño empieza a dibujar sus propias imágenes, no copias de lo que ha visto, sino sus interpretaciones, sus visiones. La IA generativa funciona de manera similar, utilizando grandes conjuntos de datos en lugar de crayones y papel.
Pero aquí es donde las cejas se fruncen con escepticismo. ¿Cómo una máquina, una maraña de cables y códigos, decide qué crear? La respuesta está en los patrones. La IA generativa es una buscadora de patrones; aprende de los datos que se le proporcionan, identificando tendencias, estilos y estructuras. Luego, utiliza este conocimiento para generar nuevas creaciones, ya sea texto, imágenes, música o incluso código.
Sin embargo, cuando nos encontramos ante la galería de creaciones de la IA generativa, debemos preguntarnos: ¿estamos viendo una creatividad genuina o simplemente se nos muestra un espejo de nuestros propios pensamientos, reempaquetados y estilizados por algoritmos? La línea entre la creación y la imitación es muy fina, y la IA generativa baila sobre ella con la gracia de un equilibrista.
¿Es la IA creativa?:Respondiendo a lo incontestable
La creatividad siempre ha tenido que ver con la chispa, la lucha, la ¡Ajá! momentos. Si entregamos esos momentos a las máquinas, ¿corremos el riesgo de anular precisamente lo que hace que el arte sea especial?
¿Y qué pasa con la autenticidad? Si todo empieza a parecer pulido por la IA, todo podría desdibujarse. ¿Sabes cómo a veces ves esas fotos perfectamente retocadas y ya no parecen reales? Ese es el ambiente al que podríamos estar dirigiéndonos. La IA puede producir contenido hermoso e impecable, pero ¿eso lo hace mejor? ¿O simplemente significa que todos vamos a estar nadando en un mar de creaciones pulidas, pero sin alma? Es como tener una caja de bombones donde cada pieza tiene exactamente el mismo sabor: ¿dónde está la diversión en eso?
Además, hablemos de originalidad.
La IA funciona aprendiendo de lo que ya existe, ¿no es así? Por lo tanto, si bien es excelente para remezclar y combinar ideas, no aporta exactamente algo completamente nuevo. Si seguimos alimentando a la máquina, ¿no acabaremos obteniendo… bueno, más de lo mismo? Existe el riesgo de que la innovación se detenga porque todo empieza a extraer del mismo conjunto de elementos generados por la IA. Como dice el refrán: “Si quieres que algo se haga bien, hazlo tú mismo”.
Quizás eso es algo que los creadores necesitan recordar.
Crédito de la imagen destacada: Kerem Gülen/Ideograma